Asumiéndose cada vez más como una tendencia creciente, el Dropshipping puede ser la solución para reactivar tu negocio con la pandemia.
Las compras online de productos pueden ser facilitados por la implementación de modelos de negocio a terceros sin que el consumidor se perciba de los intervinientes en el proceso.
Este tipo de operaciones permite al promotor desenvolver su actividad sin tener que preocuparse con una serie de factores que incluyen stock o la logística de transporte. Por otro lado, permite de forma fácil la modificación de productos en cartera, facilitando la adaptación a los mercados en los que la empresa opera. El modelo de negocio que aquí hablamos se llama dropshipping.
El promotor de un negocio de dropshipping es un agente comercial que realiza la conexión entre la producción y la entrega física de un producto a un cliente. Por otro lado, todas las operaciones relacionadas con la entrega son realizadas por el proveedor.
Con este proceso, el emprendedor busca clientes, evalúa sus necesidades y el valor de mercado, promoviendo el producto para satisfacer las necesidades. Aunque la gran mayoría de los ejemplos de dropshipping están relacionados con el comercio electrónico, existen modelos de negocio comerciales, como las ventas por catálogo.
Para la correcta implementación de una actividad de dropshipping se deberán tener en cuenta los siguientes puntos: